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Don
Fulgencio Ramírez, vecino de la aldea de san Bartolomé Becerra mostró
satisfacción porque luego de
contraposiciones para la
utilización del pozo perforado en aquella comunidad se ha tenido el visto bueno
en varias pruebas de laboratorio del agua y se determinó que era apta para el
consumo humano.
Indico
que muchos vecinos le tildaron de inepto e ignorante pero agradecía a Dios, al
ministerio de salud pública y la municipalidad porque se puede aprovechar el
agua del pozo y su participación solo se ha limitado defender sus derechos y
subrayo que no está a favor ni en contra de la Auxiliatura, ni del COCODE de la comunidad, sino de la población que
necesita el agua.
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