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Hace
cuatro años por estas fechas la efervescencia política estaba en curso al igual
que hoy, mencionándose a los candidatos que participarían en las elecciones
para ocupar los diversos cargos públicos, y el nombre que más atraía la
atención de los votantes para Presidente de la República era el suyo, Otto
Pérez Molina, que con el puño levantado encrespaba el ánimo de sus
correligionarios y se constituía en la esperanza por el ofrecimiento de
seguridad, trabajo , salud, educación y desarrollo para los guatemaltecos. Sin
embargo cuatro años después la situación no ha tenido muchos cambios. La
población estuvo, atenta a esos ofrecimientos que del todo no fueron como la
población esperaba, aunque hubo algunos resultados, el crimen organizado hizo
de las suyas a través del narcotráfico, extorsiones, secuestros y otros males
que estuvieron fuera del alcance de la autoridad, males que a la postre desencantaron
el ánimo de los guatemaltecos.
Aunado
a lo anterior, cercano a usted, la señora Vice presidenta Roxana Baldetti, tuvo
su escenario y luz propia, que desgastó la imagen del gobierno, con discursos
vociferantes que enaltecían su propia personalidad, pero que no se
cristalizaban en la realidad; con programas de imagen pero que no solucionaban
problemas de fondo, tales como pintar hospitales, generar programas de atención
a los jóvenes, sin establecer políticas a largo plazo de reinserción y educación
a la juventud que se mueve en ámbitos delincuenciales.
Pero
lo que pone en el ojo del huracán a su Gobierno señor Presidente, es el tema de
defraudación tributaria en el mismo seno de la SAT, y como diera a conocer la
CICIG y el MP, el cabecilla era Juan Carlos Monzón, secretario privado de la
Vice Presidenta, con la cúpula de la
Súper Intendencia de Administración Tributaria, donde sustrajeron millones de
quetzales que impacta a nivel nacional por la falta de medicinas en los
hospitales, así como grandes problemas de desnutrición, y faltan escritorios y
equipo en establecimientos educativos, entre otros.
Con
el debido respeto señor Presidente, le jugaron la vuelta o ¿qué pasó?
Eso es lamentable que el cabecilla de esa
estructura criminal estaba al lado de su oficina y se halla movido como Pedro
por su casa, y así como usted ha indicado en spots publicitarios, que se
esforzaba por atender las necesidades de la población, los delincuentes
llenaban sus bolsillos con dinero del pueblo trabajador y esforzado de
Guatemala, ¿Qué paso con su aparato de seguridad que no pudo detectar el cáncer
que se cernía muy cerca de usted?
Esta
situación debilita el sistema de Gobierno, porque ha perdido la credibilidad y
surgen más preguntas: ¿Qué va a pasar?, ¿Se investigara hasta dar con todos los
responsables? ¿Se ventilaran los procesos para satisfacción de la ciudadanía?
¿Se les castigara como reza la ley? ,Guatemala necesita respuestas señor
Presidente, pero también soluciones concretas y está en sus manos el que se
aclare esta situación ante Dios y la ley, porque el pueblo puso su confianza en
usted y la mejor manera de corresponder es entregar cuentas claras y su
responsabilidad es conducir el país de forma segura y correcta, y si alguien
cercano a usted es sindicado y comprobada su participación, que también pague
las consecuencias con todo el peso de la ley, y que devuelva lo robado y lo
reintegre al pueblo de Guatemala, de acuerdo a la ley de Extinción de dominio,
porque es dinero mal habido, aparte de ello, por el dolor, la tristeza,
incomodidades y lágrimas que los guatemaltecos han sufrido por la falta de
satisfactores a innumerables necesidades.
JRCG.
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